En este segundo libro de la trilogía de Caraval, la gran protagonista es Donatella. Recuerdo que, durante durante el primer libro, os comenté que Donatella no me había dado buenas vibras y que intuía que el segundo libro, al ser contado desde su perspectiva, no me gustaría tanto como el primero. Estaba totalmente equivocada. He quedado fascinada con su valentía, coraje y madurez.
A lo largo del libro, he logrado conocer a Tella, quizás incluso de una forma más profunda que con su hermana en el primer libro. Tella es una persona decidida, la cual luchará por lo que quiere hasta el final, teniendo sus ideas muy claras. Sin embargo, algo que si me choca mucho en este libro es la edad de las protagonistas, ya que Tella solo tiene 16 años. Creo recordar que Katniss Everdeen en "Los juegos del hambre" y Tris en "Divergente", tenían esa misma edad y a mi me parecía de lo más normal. Quizás sea porque ya tengo 24 😅
Por otro lado, en relación a la trama, durante este libro ha tenido mucha más coherencia y parece como si todo hubiese cobrado sentido. La autora juega con los lectores de una forma muy curiosa, y es que nunca deja de sorprenderte, incluso en algunos plow twists muy predecibles, nunca esperas que pasará realmente. Es algo que hace que te enganches y no quieras parar de leer.
Para finalizar y dejaros con ganas de leer este libro, os diré que los personajes secundarios son maravillosos, todos ellos son muy enigmáticos. Nunca llegas a saber del todo quién es real, y quién está actuando como parte del juego de Legend. Sin duda, os enamorareis de más de uno de ellos 🙊
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